jueves, 20 de diciembre de 2012

Cuando queda claro no TODOS somos iguales...


Es fácil que se nos encojan las tripas y se nos retuerza el hígado cuando escuchamos a presidentes de grandes compañías, políticos y banqueros, decirnos que "están siendo tiempos difíciles", "que saben que la gente lo está pasando mal", pero que "todos hemos de hacer un esfuerzo". Todos... pero la pregunta es, ¿quiénes somos todos?. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha publicado un Informe de Gobierno Corporativo en el que, en contra de lo que nos pasa a aquellos a los que se nos pide un esfuerzo, a los que nos quitan la paga extra, nos mandan a la calle con indemnizaciones de broma, padecemos EREs y demás instrumentos de control de ese gasto que tan alocadamente hemos debido hacer, los altos directivos de las empresas españolas que emiten valores (los que cotizan en Bolsa, vamos), han visto elevados sus ingresos anuales un 2,6% hasta los 466.678 euros. Una cifra que, aunque al común de los mortales pueda parecernos elevada, para ellos puede parecer ridícula si tenemos en cuenta lo que cobraron los consejeros de estas empresas en 2011: 279.300 euros anuales de media, un 4% más que el año anterior (incremento que alcanza un 7,3% si se tienen un cuenta las retribuciones de consejeros cesados en el año y otro tipo de "retribuciones singulares"). Para que los que no llegamos a fin de mes nos hagamos una idea, el equivalente a 31 veces el salario mínimo profesional, es decir, 641 euros al mes en 14 pagas (para los que aun existen). Son dos la pregunta que desde la Asociación se nos ocurre: primero, ¿el esfuerzo no es para todos? y segundo, ¿no se supone que la responsabilidad en la toma de decisiones es un factor relevante a la hora de tener sueldos tan  elevados?. Es decir, un alto directivo cobra tanto dinero, porque se supone que tiene una responsabilidad en la toma de decisiones y, cuando un país está arruinado, cuando se cierran empresas, cuando las cifras del paro son escandalosas, cuando la economía no va bien, será porque no se han tomado las decisiones correctas... entonces, ¿no habría que "castigar" de alguna forma la mala toma de decisiones?, ¿por qué se reduce el sueldo del trabajador "raso", o se le despide, en el peor de los casos...y los que toman las decisiones ganan más que una veintena de trabajadores mileuristas???
Un último apunte: solo una de cada diez consejeros son mujeres... 
Y una curiosidad: de las principales cabeceras de la prensa española, sólo Público tienen una noticia relacionada con esto en portada... ¿dónde están los medios de comunicación en esta crisis? 


6 comentarios:

  1. Ante estos hechos, desde la representación sindical se podría actuar. Necesitamos una plataforma STOP aumentos a la alta Dirección y Consejeros. Hasta ahora ellos son los que reparten y por supuesto se llevan la mejor parte. Ellos piensan que en períodos de crisis la gestión es más difícil y por tanto tienen que ganar más ero se suben el sueldo o los bonus. Ellos creen que su trabajo vale más, cuando la mayor parte de los beneficios de las empresas para las que trabajan los han obtenido recortando empleo, deslocalizando a los trabajadores o cargando de más trabajo a los que quedan, ganando igual o menos. Ese es su mérito, esa es nuestra inseguridad...

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  2. ¿Y dónde está la oposición, que tampoco sabe ganarse el sueldo?

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  3. La razón también se revuelve, y la razón feminista que lucha por la justicia social hace cuentas y calcula cuantos sueldos de supervivencia se podrían sacar de uno solo.

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  4. El incremento de remuneraciones de los ejecutivos que han llevado a las empresas a la bancarrota es algo que va contra toda lógica, incluída la lógica capitalista. Más aún cuando se trata de empresas que han sido rescatadas con dinero público. Ahí está el caso de Rodrigo Rato y sus colegas, que se han retirado con unas indemnizaciones de escándalo que estamos pagando con nuestros impuestos.
    En cuanto a la infra representación femenina en las empresas, es un síntoma más -otro- de que no se están cumpliendo los objetivos de paridad. Claro que eso a este gobierno le importa poco o nada.

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  5. La idea de sociedad que teníamos se está desdibujando. El interés general ha desaparecido del escenario, solo se mantiene en los discursos como engañabobos ofensivo, el parámetro director es el interés de unas elites. Gobierno y oposición representan papeles aparentemente contrarios para mantener el juego que les permite tener entretenida a la ciudadanía mientras que esas elites se quedan con todo lo que sea rentable.
    Entre tanto, esos gestores que tienen unos sueldos altísimos por asegurar esos beneficios de las elites, con unos resultados que penalizan a la ciudadanía sin que se vean afectados por ello ¿cuál es su mérito para cobrar tanto?, ¿pertenecer a unas castas o familias que se perpetúan en el uso del poder en su propio beneficio y en el de las elites que tienen detrás?
    Para estas castas el problema de la mujer es secundario, si es que lo ven como tal. Sus mujeres, en general, no tienen como causa la de la mujer sino la del poder y los hombres del grupo ..¡a la vista está!

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  6. Nuestro enemigo no son los hombres sino el patriarcado, y a la vista está en qué clase de cultura patriarcal retrógrada están educados los hombres y mujeres del gobierno actual. Nuestros hombres deben saberlo y deben saber en qué les afecta todo esto también a ellos. Tampoco a ellos les están haciendo ningún favor.

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